Ama y esclava (VI: El regalo).

Después de unas correctas enseñanzas toca la hora de la práctica de lo aprendido, nuestra esclava tendrá oportunidad de demostrar lo aprendido siendo ama de otra esclava durante 24 horas.


Al rapar por completo la cabeza de mi esclava, tal como os contaba en el relato anterior, la sometía a un nivel de humillación y de despersonalización extremos que sólo son capaces de afrontar aquellas personas que asumen sin complejos, plenamente, el juego sadomasoquista.

Me dijo que necesitaba un tiempo para acostumbrarse a su nueva imagen y que al verse calva se sentía como desnuda e indefensa, por lo que me pidió que la aceptase para un internamiento prolongado, de varias semanas. Como nos encontrabamos en el período vacacional, pude aceptar sin problemas:

Realmente, amo, has logrado que sienta una absoluta dependencia hacia ti. Solo a tu lado me siento segura y protegida. Te necesito y a cambio me pongo a tu entera disposición, las 24 horas del día. Ahora, completamente rapada, siento lo que es la verdadera esclavitud...

Aquellas semanas nuestros juegos BDSM alcanzaron una intensidad y un morbo inusitados. Me sirvió de criada domestica vestida de "french latex maid", frecuentemente amordazada o penetrada por un plug anal. A la hora de follar fue una ardiente puta que me daba placer por todos sus orificios, eligiese el que eligiese, y en las escenas de humillación y de tortura podía ser una fiel perrita encadenada, pero también llegó a ser capaz de soportar pruebas mas dolorosas: pinzas con pesos en los pezones y los labios vaginales, por ejemplo.

Pero además de ser una maravillosa esclava, también era una persona culta, inteligente y sensible, por lo que fuera de los horarios que teníamos establecidos para los juegos SM pasamos ratos muy agradables.

Por otra parte aquel largo internamiento me permitió darle una primera oportunidad para actuar como domina. Como ya sabeis mi esclava vacila entre el deseo de dominar y el de ser dominada, y su esclavitud total era el precio que me pagaba por aprender de mi todos los secretos de la dominación SM. Educarle como esclava llevandole hasta los limites de la humillación era para mi la unica forma posible de enseñarle los secretos de la dominación: " Tu me has pedido que te enseñe. Acepto. Seré tu maestro. Haré de ti un ama fuerte y poderosa y te aseguro que te maravillarás de lo que muy pronto serás capaz de hacer y de lo mucho que gozarás. Pero todo tiene un precio. Me pagarás convirtiendote en mi esclava, mi perra mas fiel, mi puta caliente. Para los demás llegarás a ser un ama dura e inflexible pero para mi valdrás menos que el mas miserable de los esclavos..."

Esas habían sido mis condiciones.

Una noche, después de someterla a una intensa sesión de castigo físico en la cruz (latigazos, cera caliente, pinzas metálicas, penetracion con consoladores de castigo...) la llevé a rastras, como una perra, hasta una jaula donde la encerré y donde pasó la noche.

Por la mañana ordené a una doncella, otra aprendiz de esclava que había hecho venir ex profeso, que fuese a recogerla. Le abrió la jaula, la sacó de allí y la desnudó, diciendole que cumplia ordenes. La esclava, completamente entregada, se dejaba hacer mansamente, sin preguntar. Posiblemente se preparaba mentalmente para recibir nuevos castigos.

La doncella la tumbó sobre la mesa de torturas y la inmovilizó con las correas, pero a continuación empezó a masajearla dulcemente con aceite balsámico y empezó a cubrirla de besos. Muy pronto los pechos de la esclava empezaron a mostrar sintomas de excitación, pero entonces la doncella ya estaba trabajandole el coño, primero con las yemas de los dedos, luego con la mano entera y finalmente con la boca.

Sin duda, la esclava recordaba perfectamente el punto 44 de mis reglas, que le prohibian tajantemente correrse sin mi autorización: "Tus orgasmos serán siempre autorizados y administrados por tu amo. No tendrás ninguno sin su permiso, que incluso suplicarás cuando estés siendo usada por él"

Por ello, cuando la doncella le dijo que tenía mi autorización para correrse, se dejó llevar a una verdadera sucesión de orgasmos que apuró tanto como pudo, a pesar de permanecer inmovilizada.

Cuando cesaron los jadeos aparecí yo, enfundado en cuero negro, látigo en mano. Al verme, la esclava se apresuró a agradecerme que le hubiese concedido aquellos orgasmos.

Manteniendola inmovilizada, la acaricié en silencio.

Luego ordené a la doncella que se acercase y la follé por el culo a la vista de la esclava. Fue un polvo rápido e intenso y naturalmente acabó limpiandomela con su lengua

A continuación, ordené a la doncella que me trajese un collar de perra con la boca y se lo impuse, recordandole que aquello era el símbolo de su esclavitud: a partir de este momento tus deseos y tu voluntad han sido anulados. Tus unicos deseos son los de tu dueño, y tu unico placer será entregarte a él para ser usada como perra, como puta y como esclava.

Aceptas ?

Si...

Dos bofetones resonaron sobre su cara

Si, mi amo.

Esto esta mejor. Ahora besame los pies y retirate a tu esquina.

Despues de que lo hiciese me dirigí a la esclava que todavía permenecía amarrada a la mesa de torturas:

Ya lo ves. Una nueva esclava acaba de ingresar en mi cuadra. Meses atrás te acepté a mi servicio para enseñarte todos los secretos del arte de la dominación. Ahora eres para mi una buena esclava. Pero todavía espero mucho mas de ti. Por ello te tengo preparados nuevos retos.

Mira: te regalo esta nueva esclava durante 24 horas y quiero que me demuestres lo que serias capaz de hacer como ama. No te impongo restricción alguna. Al contrario. Quiero que la trates con dureza y con desprecio. Que seas esa ama dura que llevas dentro.

Aquí te entrego la cadena de su collar de perra. Ponsela y llevatela. Luego sube al vestuario y elige las prendas que desees para revestirte como dómina, o para amoldar la esclava a tus gustos.

Exactamente dentro de veinticuatro horas te quiero aquí, para ser minuciosamente informado de lo que hiciste. Adelante.

Gracias por concederme este honor, mi amo... fue lo unico que pudo decir antes de que le diese la orden de retirarse

...

Faltaban veinte minutos para que se cumpliesen aquellas veinticuatro horas cuando mi esclava convertida en ama se presentó ante mi. Lucía unas botas altas de tacón de aguja como las que había usado cuando la acepté como esclava y también muñequeras, un discreto collar y un ajustado corpiño de cuero negro. Para ocultar su cabeza rapada se había puesto una exuberante peluca, muy chillona, de rubia platino.

En sus manos sostenía un látigo de nueve colas que dejó a un lado cuando le dije que se acercase. Sin que fuese necesario darle ninguna orden, ella misma empezó a avanzar hacia mi a cuatro patas, sin duda para demostrarme que ante mí seguia sintiendose esclava.

Se colocó a mi lado, alzó la cabeza y me entregó unas hojas manuscritas que llevaba en la boca.

Les di una ojeada y se las hice leer en voz alta:

"A los pies de mi Señor comparezco humildemente para darle cuenta del uso que yo, la mas miserable de sus esclavas, he hecho del regalo que me concedió durante 24 horas. Se que es imposible igualar la sabiduría de mi dueño, pero en cumplimiento de su voluntad he procurado poner en practica sus enseñanzas para adiestrar a la nueva esclava y hacer de ella una perra sumisa y entregada a los deseos de mi amo y señor

Junto a este mensaje le entrego, mi amo, unos pocos billetes. Son el precio que obtuve por su alquiler. Vos me habeis enseñado que vuestras esclavas deben serviros como putas. Por ello llevé esta perrita hasta un bar de carretera, pintarrajeada como una puta barata. Pronto le llegaron proposiciones de camioneros y gente de paso, pero solo le autoricé a acceder ante el mas repugnante de todos, un individuo rudo y borracho. Fue alli mismo, en unos malolientes y sucios lavabos, donde aquel hombre la magreó, la sobó, se la hizo chupar y la enculó, todo a cambio de unos billetes que aquel tio se hizo sacar con la boca de sus propios calzoncillos. Por lo que pude comprobar, el comportamiento de la aprendiza estuvo en consonancia con el papel que le hice representar. Creo que mi amo puede estar seguro de haber incorporado una autentica puta a su harén. Por ello me la llevé a una casa de "tatoos"donde la he hecho marcar de forma indeleble en la entrepierna: en la parte interior de uno de sus muslos lleva grabada para Vos la palabra "puta" y en la parte interior del otro la palabra "esclava".

De mi amo también aprendí que una esclava debe saber comportarse de forma morbosa, obscena y sexual. Para ello sometí a varias puebas la perrita que me regalasteis durante 24 horas. La hice chupar varias pollas de latex de vuestro arsenal, aquellas que mas habeis usado conmgo, le di a beber mi orina hasta que se acostumbró a recibirla con la boca abierta, me hice besar el culo por ella, la enseñé a caminar sobre tacones de 13 o 14 cm. como se que os gusta, la vestí con prendas extremadamente fetichistas exclusivamente de color rojo -aquel que vos decís que es mas propio de las putas-, me hice limpiar las botas con su lengua, la penetré analmente y la he enseñado a lucir con orgullo el collar de perra que le habeis impuesto. Todo ello lo he filmado en video y os ofrezco la cinta como documento para que Vos juzgueis si he satisfecho vuestro mandato.

Por ultimo, también he aprendido de vuestras enseñanzas que el momento mas sublime de la doma de una esclava es el de la humillacion y el castigo físico, porque es entonces cuando se percibe mejor todo el poder y la autoridad del amo. Por ello he querido preparar el cuerpo de esta nueva esclava para que algun dia sea capaz de regalaros el maximo placer. He modelado su cuerpo con ataduras, la he inmovilizado en la cruz con los bazos y las piernas en aspa, la he encapuchado para privarla de los sentidos, he retorcido sus pechos y he colgado de ellos pesas como las que en algun momento he llevado para Vos, la he depilado por completo, he hecho restallar el látigo sobre su piel y ahora mismo os la entrego con el culo todavía sonrosado después de una última sesión de spanking.

Vuestra nueva perrita sabe tan bien como yo que uno de los placeres que mas os gusta degustar es el de follar la boca de las esclavas. Os la devuelvo con un "O ring gag" en la boca y las manos atadas a la espalda para que lo hagais ahora mismo si os apetece. Está a punto. Pero sabed que para mi también sería un honor poder sentir una vez mas vuestra polla en mi boca, adorarla, sentir como se clava hasta el fondo de mi garganta y por ultimo llenarla con vuestra leche y tragarla si me dais permiso para ello

Si vuestro juicio es benevolente y creeis que he cumplido lo que deseabais de mi cuando me concedisteis el honor de probar para Vos la nueva aprendiza de esclava, sólo teneis que ordenarme que abra la boca.

Me tiene a sus pies para lo que desee de mi, su perra esclava".

Por supuesto, en pocos segundos una gran descarga de leche rebosaba por la comisura de los labios de mi esclava. Pero no la autoricé a tragarsela. Lo hizo la otra esclava, la aprendiza, que recogió la leche directamente de la boca de su domadora.

Ahora mismo las tengo ambas a mi lado, amarradas con cadenas por el cuello, y la boca abierta, disputandose la nueva descarga que llegará a una de ellas cuando acabe de escibir este texto.

Whipmaster

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